Sadhana son los ejercicios espirituales que tu maestro elabora especialmente para ti, y que debes practicar diaria y disciplinadamente para tu evolución. Nuestra Sadhana es ascética y contemplativa. Está basada en la explicación que hemos dado en la sección de simbología. El Bakti, Karma, Hatha, Raja y Jñana Yoga se combinan de manera armónica para formar tu Sadhana.Conforme vas avanzando, tu Maestro te enfrentará a más pruebas y compromisos dirigidos a conseguir una entrega cada vez mayor a "ti mismo", y cuyo destino final será ayudarte a descubrir "quién" eres realmente. Ese descubrimiento de la verdadera naturaleza de tu Ser te va a ayudar a salvarte de ti mismo, de tus sufrimientos y esclavitudes, enfocando tu camino hacia la iluminación, la liberación, el nirvana de los budistas, o la revelación de los cristianos. Pero lo llames como lo llames, lo importante es que "regresarás a casa" si eres disciplinado y fiel a tu Sadhana.El verdadero Tantra se aprende de maestro a discípulo.
Cuando Caín mató a Abel, Dios preguntó a Caín-¿Dónde está Abel?Y Caín no respondió.-La sangre de Abel clama las puertas del cielo -dijo Dios.Dios en ese momento maldijo a Caín diciéndole:-Errarás eternamente.Cuando matamos nuestro espejo resulta muy complicado darse cuenta de quién es uno mismo, y reconocernos. Por eso Caín camina solo por la vida, sin rumbo, sin sentido, absolutamente descentrado y perdido. Dios no le castiga, simplemente le dice que al haber matado su espejo, su destino será un devenir oscuro, pero ¿quién o qué es el espejo?.El espejo se debe entender a dos niveles:
El ego; y a través del autoanalisis y la meditación, el Jñana y Raja Yoga. Nos conocemos observando sin juzgar nuestro ego. Podemos ver un reflejo de quién o qué es el Yo observándolo en cada una de nuestras acciones del día a día; pero cuidado, sólo es un reflejo. Ramana Maharshi decía: "desapégate del ego". Si lo matas te sucederá lo mismo que a Caín, estarás perdido en este plano material, caminarás por la vida sin rumbo, desorientado, aunque creyendo que vas bien. El ego es una herramienta que nos sirve para caminar en este plano, no somos el espejo, debemos reconocer quién es el Yo y quién el ego.
En nuestra relación con los demás vemos que cada persona nos hace de espejo. Normalmente es inconsciente, sólo los maestros lo saben conscientemente. Un buen ejercicio es observar las caras de la gente tratando de discernir qué mensaje transmiten. Evidentemente usar la sociedad como espejo es más fácil que usar el ego, he ahí el Karma Yoga.En ambos casos debemos ver, después de mucho observar sin juzgar, que la vida es un teatro. Vivimos en el mundo pero en realidad no somos parte de él, todo es pura ficción, maya. Los amigos que tenemos, la gente nueva que conocemos, todo está "divinamente" organizado de manera que los otros nos trasmiten un mensaje, son nuestro espejo.Si te apegas al espejo diciendo, "estos son mis amigos, esta es mi vida", violas el principio de aparigraha, pues nada es tuyo o mío, de ahí el miedo a la soledad, a la enajenación, el temor a perder aquello que crees es tuyo, y las consecuentes reacciones depresivas o violentas. Cuando uno comienza a hacer seriamente su sadhana, muchas cosas se mueven por fuera y por dentro, y surge entonces, el primer efecto de pseudoalienación. La gente empieza a verte diferente, como si fueras un bicho raro, te dicen que has cambiado. Quizás, hasta te digan que te has metido en una secta. Estas reacciones son propias de una mente estancada e ignorante, propias de personas que temen el cambio y temen apartarse de lo "establecido", lo único que les da sustento a su pueril ego; o dicho de otra manera, personas que ni viven ni dejan vivir.Antes de empezar debes tener las ideas bien claras. Debes saber que necesitas una buena dosis de valentía para enfrentarte a tus "fantasmas". Y sobretodo, no te engañes a ti mismo creyendo que lo puedes hacer sólo cogiendo de aquí y allá lo que en el supermercado espiritual se vende. En tu evolución surgirán a grandes rasgos los pasos siguientes:
La gente te verá diferente. A los que te rodean les chocará mucho tu nueva actitud ante todo y trataran de que no te apartes del camino conocido, tal vez haciéndote la vida imposible, o criticándote. Ésta es también una etapa en la que fácilmente podemos caer en manos de falsos maestros sin escrúpulos que tratarán de engañarnos con frases bonitas, con buenas caras y muchas sonrisas. Una fase donde es muy fácil apegarse al "becerro de oro" de posibles pequeños logros. Proliferan cada día las falsas escuelas que venden iluminación rápida y mantras personalizados; cuando toda meditación es siempre con mantra, incluido el silencio, el mantra más difícil, de donde nace el Nada Yoga, un Yoga muy complejo y profundo. No te dejes engañar por vendedores de lámparas maravillosas y mantras mágicos, los tienes todos en el Bhagavad Guita. También es un momento en el que pueden surgir ciertas visiones antes reprimidas. La única verdad de éstas visiones es que muestran tus represiones, debilidades y conflictos. Ahí puede surgir el miedo y mucha gente abandona el sendero antes de empezarlo, o puedes idolatrarlos, rechazarlos y reprimirlos más aún. Y todo eso te lleva a la dispersión y al descentramiento.
Miedo a quedarte solo y sin amigos, por tanto, apego a ellos y posesividad. El ego comienza a tenderte trampas y ponerte excusas, diciéndote que son parte de tu vida, que no debes perderlos. Es el miedo del ego a la soledad. Los amigos vienen y van, pero la vida es generosa y te va poniendo nuevos amigos, dependiendo del nivel de evolución en el que estés, para que sigas tu sendero y vayas aprendiendo. Observarás aquí tus estancamientos, tu resistencia a progresar, a enfrentarte a tu soledad, por consiguiente, a ti mismo. Puede surgir la repulsa a abandonar todo eso conocido, lo cual sería un freno negativo a tu evolución. Comienza la unificación entre lo real y la fantasía, la dualidad va decreciendo y abriéndose paso a la unidad si tienes el valor de seguir adelante.
Primera trascendencia del miedo, indiferencia egoísta de la soledad. Puedes mantener los amigos anteriores pero sólo te importa tu ego, tu egoísmo, no eres afectuoso con ellos, o si lo eres, es por narcisismo, para que te idolatren. Estás desapegado aunque de un modo nihilista. Empiezas a recordar los viajes astrales, la sensación de falsa libertad, las primeras megalomanías, vanidades y orgullos espirituales. Hay que esforzarse por regresar al cuerpo para seguir caminando y no quedarse estancado. El discípulo avanzado empieza a creerse superior, compite, desea tener razón, incluso más sazón que su Maestro. La fuerza y la soberbia de manipura le dominan. Es el momento en el cual el Maestro aguarda en silencio, esperando que la luz surja y el discípulo entre en la siguiente fase. Si no lo hace el discípulo pronto o tarde acabará separándose. El Maestro seguirá guardando silencio y deseándole suerte en la vida.
Aparición de nuevos amigos y conocidos que te ayudan a superar el egoísmo, dominando también el narcisismo y alcanzando nuevos niveles evolutivos. Anahata se abre, el amor se proyecta en la medida en que eres capaz de apegarte al amor, desinteresandamente evidentemente, y hacer desaparecer las dudas. Las dudas te pueden hundir, creer es progresar. El amor devocional sin esperar nada a cambio, la llave.
Surge una crisis existencial muy dura, la tristeza serena, la soledad sosegada, miedo a inexistir, miedo a no dejar huella, el sueño y la realidad son prácticamente iguales. El reto a sobreponerse es darse cuenta de que el sueño es un reflejo de la realidad. La nitidez con que el espejo te muestra es grande y corres el riesgo de identificarte. Creer que tú eres el espejo viene de cultivar conceptos: "yo soy el espíritu eterno, inmortal, más allá del nacimiento y la muerte". Meditar aquí, significa estar en la no-mente, el control sobre el cuerpo y sus sentidos es grande, las emociones y los pensamientos no te esclavizan, estás muy desapegado de ellos.
Integración social, vives en el mundo afectivamente pero no formas parte de él. Ves maya, la ilusión cósmica, el juego de Dios, la danza de Sakti, el velo de Isis, como una creación de tu ment. Las cosas que deseas se crean, manipulas maya a voluntad, la creación y la manipulación de maya está en tus manos. Aquí ya eres el dueño de tu vida, antes eras un esclavo. Los sueños aparecen en términos de ser o no-ser, existencia e inexistencia. Surge el apego a la existencia y el miedo a la inexistencia. La materia y la mente son uno por eso puedes crear y destruir a voluntad con sólo desearlo. Pero no las otras dualidades, tú no existes pero el sueño sí, y cuando hay sueño sin soñador aparece la auténtica realidad. No hay mente, pero todo es maya, es la totalidad la que sueña, Siva es el que sueña. Éste es el nivel de los profetas apocalípticos y no apocalípticos.
Integración del TÚ y el YO, la dualidad desaparece, la soledad y la totalidad son una misma cosa, el todo y la nada, la liberación está próxima, ya no hay símbolos ni formas, sólo existe el sonido, la nada. Puedes soñar la nada y conocer la nada pues todo es lo mismo. Buda dice: "cuando se extingue la llama, ¿qué queda?"Conocemos el YO a través del TÚ, bien usando la sociedad como espejo, bien usando el ego como espejo, en absoluta soledad, o de manera mixta con vuestro sadhana y vuestra meditación diaria sobre Yama y Niyama. En una primera meditación sólo veréis normas y prohibiciones, en posteriores meditaciones esas prohibiciones irán gradualmente desapareciendo hasta que el esclavo desaparezca y aparezca el amo, el que lleva las riendas de la vida, el que no es prisionero de emociones, pensamientos, ideas fijas, prejuicios, condicionamientos, etc.La imagen que tenemos de la muerte nos puede dar también mucho conocimiento. Cuanto más tranquila y serena sea, más arriba estaremos, cuanto más traumática, o mayor miedo tengamos, mayor será la posesividad material. Sólo hay que desapegarse del ego, pues el ego crea maya. Desapegarse de amigos, familiares, no tiene sentido, más bien puede causarnos traumas si no se hace bien. Pretender poseer amigos, familiares, amores..., nos lleva a la misma situación traumática que la renuncia mal hecha, ¡mucho cuidado con romper el espejo!. Todo lo que sube tiene que bajar, no penséis en ningún momento que éste es un sendero ascendente, pues no lo es. El sendero es circular, del uno va al siete y del siete al uno, o puede dar saltos, pero siempre circular. A cada vuelta que se da, nueva consciencia adquirida y mayor comprensión del funcionamiento de nuestro cuerpo, mente, emociones, alma y sus secretos, pero dependiendo del grado de ética que tengas podrás usarlos o no, o quizá ellos te usen a ti.Esta es la sagrada rueda del Samshara, romperla es alcanzar la iluminación, la absoluta libertad, el Kaivalya, el octavo paso. Quien lo merezca y escuche con humilde corazón obtendrá el secreto de los secretos, la liberación, el nirvana, la revelación...